domingo, 12 de marzo de 2017

Perspectivas para el desarrollo de la administración y retos para la dirección de las organizaciones.


En este apartado hablaremos a cerca de cómo la administración se ha visto modificada por el entorno dinámico en el que se desarrolla y más específicamente de los factores que influyen en la etapa de dirección del proceso administrativo.

Las variables

Imagen tomada de donde vivo, gestión administrativa

Para comenzar cabe mencionar que la dirección va mucho más allá que la simple coordinación de tareas o el objetivo de trazar el rumbo de la empresa, es decir, que incluye varios factores que deben controlarse, entre ellos las tres grandes variables que debemos tomar en cuenta son, según Guido Angello Castro Ríos, la gestión de la incertidumbre, la estructura compleja de la empresa al estar integrada por sistemas complejos reflexivos (es decir, personas) y la variabilidad de las condiciones del entorno inmediato.

Comencemos por el primer punto, la incertidumbre, la cual tiene como característica principal que no sólo se desconoce el resultado final, sino que este tampoco puede ser predicho en términos de probabilidades objetivas, como sucedería con el riego en el cual se conocen las probabilidades de las alternativas existentes.

Esta característica implica la complejidad de controlar esta variable pues no se puede predecir un resultado, así que depende de la capacidad de la dirección de la empresa, su experiencia y el análisis de la situación el desarrollar un plan estratégico para tratar de dirigir a la empresa dentro de esta incertidumbre.

A esto, se suma también la complejidad de los sistema sociales que conforman a la organización, pues la empresa está formada por personas con dos características importantes, la conciencia y el propósito, lo que implica que los miembros de la empresa continuamente aprenden y adquieren nuevas cualidades, por lo que la complejidad de la empresa radica en orientar estas nuevas cualidades al cumplimiento de los objetivos de la organización y a que las personas participen activamente dentro de ella.

Finalmente, la tercera variable se refiere a que la dirección debe prestar atención a lo que sucede a su alrededor, pues el entorno donde se desenvuelve la empresa además de ser variable, representa un impacto en la organización. Por lo que es de gran importancia que la dirección cuente con las capacidades y habilidades necesarias no sólo para analizar el entorno actual, sino también para predecir un entorno futuro y estar preparados para reaccionar rápidamente y enfrentarlo de la manera más adecuada para la empresa.


El entorno

Imagen tomada de The Social Science Post

Siguiendo con la importancia de esta variable, hay una cita de gran relevancia en la lectura:

“no es el entorno per se lo que cuenta, sino la capacidad de organización para hacer frente al mismo (para predecirlo, comprenderlo, enfrentarse con su diversidad y reaccionar rápidamente ante él)” (Ríos, 2011)

Como mencionábamos antes, el entorno siempre va a influir en el comportamiento de la empresa, sin embargo el impacto que tenga no va a depender tanto del entorno en sí, sino de la capacidad que la dirección para gestionar las acciones de la organización y de las acciones que tomen los miembros para enfrentar las condiciones externas a la empresa.

Estoy de acuerdo con esta afirmación, pues el entorno puede presentarse a favor o en contra de los objetivos de la empresa. En el primer caso, el entorno ayudará a hacer más sencillo el desarrollo de la estrategia planteada por la empresa, sin embargo sin una estrategia adecuada, el entorno no aportará gran avance en la consecución de objetivos.

Por el otro lado, si el entorno va en contra de la estrategia no significa que la organización deba rendirse y afrontar las consecuencias que le traerá, sino que depende de la capacidad de adaptación de la estrategia que se tenía para afrontar las nuevas condiciones que presenta el entorno y sacar el mejor provecho de ellas.

De esta manera, el entorno puede ser variable ya sea a favor o en contra del plan de la empresa, sin embargo el impacto y las consecuencias de este en la organización dependen de las herramientas con las que cuente la dirección y el personal en general, para hacer frente a la situación, ya sea presente o futura, por lo que el personal directivo debe tener una amplia visión para anticipar los posibles cambios en el entorno y pensar en un plan de acción.


La estrategia

Imagen tomada de Pastillas Gerenciales, Órdenes y estrategia.

Más que definir una estrategia específica se debe aclarar que el enfoque estratégico elegido por la empresa, así como su profundización y la forma en que la organización lo comprenda será un punto esencial en el desarrollo de la misma.

Sin importar el tipo de estrategia a utilizar, una parte importante y característica de ésta es la diversidad, que tiene que ver con los valores diferenciales existentes entre los miembros  la empresa y con el lenguaje, interpretación e interacción de los mismos.  Esta pluralidad de interpretaciones dan como resultado un mundo nuevo de conceptos y una multiplicidad de variables, las cuales deben ser tomadas en cuenta por los directivos para desarrollar una habilidad comunicativa que permita usar los distintos lenguajes y culturas para crear una herramienta de integración y articulación fundamentada en un lenguaje organizacional que facilite el éxito de la empresa.

El fin de la estrategia consiste en lograr la responsabilidad social, y dentro de ella la sostenibilidad, que garantice la perdurabilidad del sistema, así como el bienestar económico y profesional de sus integrantes.

 Los problemas

Imagen tomada de UGM


Con respecto a los actores individuales, existen tres problemas que los afectan tanto a ellos como a los intereses de la empresa y son los siguientes:

  •  La alienación: Tiene que ver con el impacto de la organización en los miembros de la misma, es decir, el reto de dirigir a éstos como un conjunto unificado para la consecución de los objetivos de la empresa.
  •  La inequidad: Implica la falta de un programa de motivación que brinde a los empleados una equidad en las recompensas por sus aportes a la organización, generando inconformidad entre ellos y caída en su desempeño dentro de la empresa.
  • El exceso de conformidad o ritualismo: Consiste en un exceso de burocracia que limita las oportunidades de cambio y aportaciones nuevas que podrían ser positivas para la organización.


 Conclusión:

La dirección es una etapa de suma importancia en el desarrollo del proceso administrativo, en la cual están estrechamente involucradas las tres variables de las que hablamos en esta entrada, por lo cual los directivos necesitan estar sumamente capacitados para tomar decisiones fundamentadas en el comportamiento de la incertidumbre, los miembros que conforman la empresa y el entorno.

De esta manera serán capaces de realizar un análisis tomando en cuenta la situación presente, los antecedentes y las predicciones futuras que les darán un panorama más amplio y permitirán desarrollar un plan de acción que contemple los riesgo y oportunidades para el desarrollo de la organización.

Referencias

UNID. (2013). Dirección. Recuperado el Marzo de 2017, de Proceso adminsitrativo: http://moodle2.unid.edu.mx/dts_cursos_mdl/lic/AE/PA/S10/PA10_Lectura.pdf
Administracion de Empresas. (s.f.). ¿Qué es la Teoría de la Equidad en Recursos Humanos? Recuperado el Marzo de 2017, de http://admindeempresas.blogspot.mx/2014/09/que-es-la-teoria-de-la-equidad-en.html
Molina, E. M. (03 de Agosto de 2004). Alineación de recursos humanos y gestión organizacional. Recuperado el Marzo de 2017, de Gestiopolis: https://www.gestiopolis.com/alineacion-recursos-humanos-gestion-organizacional/
Ríos, G. A. (2011). Perspectivas para el desarrollo de la administración y retos para la dirección de las organizaciones. Recuperado el Marzo de 2017, de Redalyc: http://brd.unid.edu.mx/perspectivas-para-el-desarrollo-de-la-administracion-y-retos-para-la-direccion-de-las-organizaciones/